La última etapa durante mi viaje por la provincia de León fue Ponferrada, ciudad famosa por su castillo templario y punto de paso de los peregrinos hacia Santiago de Compostela. Es la capital del Bierzo, una comarca situada en el extremo noroccidental de la comunidad de Castilla y León.
El producto estrella de la zona es el vino, una producción de alta calidad que de hecho se encuentra entre los más valorados en los mercados nacionales e internacionales. Además, los alrededores de Ponferrada son ricos en historia, cultura, paisajes naturales aun vírgenes y rutas de senderismo. Por esta razón, tras haber dedicado un día a la visita de la ciudad os recomiendo quedar más para disfrutar de todo el encanto de un área poco conocida entre los turístas.
Los 4 sitios que ver cerca de Ponferrada
Para visitar los lugares que voy a mencionar lo ideal sería un itinerario de 2 días de Ponferrada. El coche es imprescindible ya que el transporte público no llega a la mayoría de los sitios de la zona. La única alternativa es viajar en taxi y es lo que hice junto a mi guía de turismo, Aida. Nuestro conductor fue José Luiz Pérez, propietario de una empresa especializada en el transporte de visitantes y peregrinos a tarifas fijas. Él es una persona muy atenta y seria y además me dio muchas informaciones sobre lo que ver por el Bierzo. Podéis contactarlo por correo electrónico a taxiperez1@gmail.com.
En el listado no he incluido Astorga porque he escrito este artículo específico sobre esa ciudad. Dicho eso, se encuentra a unos 60 km de Ponferrada y se puede llegar en tren o autobús.
1. Peñalba de Santiago
Declarado conjunto histórico artístico en 1976, es uno de los pueblos más bonitos de España y símbolo del Valle del Silencio. Está a poco más de 20 Km de Ponferrada y durante el recorrido se cruzan bosques de roble y ríos con cascadas naturales. Un paisaje tan increíble de una zona que parece haberse parado en el tiempo.
Situado a una altitud de 1.103 m y rodeado por los Montes Aquilianos, este pueblo constituye el mejor ejemplo de la arquitectura popular de la serranía berciana. Las casas están construidas con piedra pizarra, tienen planta rectangular y dos plantas: superior, para vivienda, e inferior, para bodega y almacén. En muchas todavía se puede observar esquinas redondeadas, un elemento arcaico testigo de la evolución de la vivienda castreña.
El sitio de mayor interés es la Iglesia de Santiago de Peñalba, construida en el siglo X en estilo mozárabe y único vestigio que queda del monasterio fundado por San Genadio en el siglo IX. Del centro hay senderos que permiten ver varias cuevas naturales, también la donde se retiró San Genadio para meditar.
Según la leyenda el nombre del Valle del Silencio está vinculado al eremita benedictino. De hecho:
“Cierto día San Genadio estaba meditando en su cueva, pero el murmullo del río no le permitía concentrase, así que, golpeando con su cayado, dijo: «cállate» y el río dejó de hacer ruido.”
2. Montes de Valdueza
Se dice que en la antigüedad por este pueblo pasaba el Camino de Santiago y por eso – desde el siglo VIII – se estableció una comunidad de monjes para recibir los peregrinos.
Declarado Bien de Interés Cultural en 1931, el Monasterio de San Pedro de Montes fue fundado por San Fructuoso en siglo VII. Luego fue reconstruido en el 895 por San Genadio, tras la invasión musulmana. Hoy se puede visitar con guía y el recorrido permite ver las reformas hechas durante las varias épocas: los capiteles en estilo prerrománico, la torre en estilo románico, las ruinas del claustro y la fachada de la iglesia del siglo XVIII.
A pocos pasos del complejo religioso, paseando entre las casas rurales del pueblo se encuentra la Cantina de Sara. Una anfitriona amable y un sitio acogedor con comida casera rica, natural y sana. Hay un plato principal: chorizo, huevos fritos, lacón, pimientos y patatas fritas. Una experiencia absolutamente recomendable.
3. Villar de los Barrios, Salas y Lombillo
Estas tres localidades están ubicadas a menos de 10 Km de Ponferrada pero sin embargo el ritmo frenético de la ciudad está mucho más lejos. En 2014 fueron declaradas Patrimonio de Interés Cultural. Es una zona muy poco poblada, rodeada por la naturaleza y conocida por su tradición vinícola. Los vinos locales se celebran cada verano durante el festival Villar de los mundos.
Paseando por las calles destacan los escudos nobles en las fachadas de los edificios, signos evidentes del pasado prestigioso de estos pueblos. Tuve la oportunidad de visitar una casa histórica donde hoy vive Nicolás – gracias por la hospitalidad – apreciando como se hayan conservado muchos recuerdos – fotos, documentos y muebles – de generaciones anteriores.
La Ruta de las 5 Iglesias es un recorrido cultural de unos 3 Km que cruza este conjunto histórico. En Villar están ubicadas la Iglesia de Santa Columba (siglo XVIII, estilo barroco), uno de los templos más grande de la comarca, y la Ermita del Santo Cristo de la Veracruz, del siglo XVII y sede de una de las cofradías más antiguas de España. Luego, en Salas está la Capilla de la Visitación, del siglo XVI y en estilo renacentista, en cuya sacristía se guarda una columna dórica procedente de la Iglesia de Peñalba. Por último, en Lombillo se pueden ver la Iglesia de San Martín del siglo XI y declarada Monumento Nacional en 1976, y la Ermita de Nuestra Señora de la Encarnación (siglo XVI, estilo renacentista). Este edificio se encuentra cerca de Las Majuelas, un mirador desde donde hay vistas preciosas de los tres pueblos y también de Ponferrada en el horizonte.
4. Las Médulas
A 25 Km de Ponferrada se puede visitar la mayor mina de oro del Imperio Romano, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1997. Las Médulas constituyen un singular paisaje de tierra rojiza debido a la extracción de oro llevada a cabo en la zona a partir del siglo I a.C. para producir monedas.
Para conseguir todo eso los romanos realizaron cientos de Km de canales por el transporte del agua de las cimas de las montañas nevadas a los túneles escavados dentro de los montes arcillosos. La presión generada por el líquido los derrumbó permitiendo entonces la extracción del oro, con 800 toneladas obtenidas durante casi dos siglos.
Existen varios caminos señalizados a pie o en bicicleta para descubrir grutas y cuevas donde se extraía el oro. Es posible acceder en algunas, por ejemplo la Cuevona, pero con linterna. Se recomienda llevar agua, calzado adecuado para el senderismo y mucho cuidado al clima porque la lluvia puede provocar inestabilidad de las paredes. El recorrido principal se hace en un par de horas. El acceso es libre, hay visitas guidas que salen de la Aula Arqueológica situada a la entrada del pueblo de Las Médulas. Aquí se encuentra además un museo dedicado a la historia del lugar y a la técnica de excavación elaborada por los romanos.
Cualquier época del año es buena para explorar este sitio, pero es en primavera cuando el contraste de colores y luces es mayor. Antes de irse de Las Médulas hay que llegar al mirador del Orellán, el punto panorámico mejor para disfrutar de todo el encanto de este entorno único en el mundo.
Visitar Las Médulas sin coche es imposible. La alternativa al taxi es apuntarse a la excursión de Ponferrada con salida de la ciudad a las 10 y regreso s las 16. Todos los detalles sobre itinerario y reserva online están disponibles en esta página.
