Mi segundo viaje en Galicia (#checkinGalizia en las redes sociales) acaba con la visita de Vigo, la ciudad más poblada de la región y localizada en su parte sur, hacia Portugal. Quedándome dos días, uno fue bastante para descubrir su casco histórico y el otro lo utilicé para hacer una excursión a las Ilas Cíes, ubicadas en la ría de Vigo. En 24 horas pude dar un paseo por los sitios más emblemáticos de la ciudad a través de cuatro pequeños itinerarios que luego voy a explicar.
En este artículo os doy todas las informaciones útiles para hacer turismo en Vigo, con consejos prácticos y los itinerarios de visita.
Cómo llegar a Vigo
Vigo está colocada en la provincia de Pontevedra, en el noroeste de la península ibérica. Es muy facil llegar aquí en coche, autobús, tren y avión desde otras ciudades españolas y europeas.
En coche
La Autovía del Noroeste (A6) y la Autovía de las Rías Baixas unen Vigo con Madrid, la distancia es de 667 kilómetros. Luego, la Autopista del Atlántico (AP9) cruza Galicia conectando Vigo con Pontevedra, Santiago de Compostela y A Coruña. También es posible viajar a Vigo desde Portugal gracias a la A3 que llega de Oporto, Lisboa y Braga.
En autobús
Hay lineas de bus directas desde varias ciudades españolas, por ejemplo Madrid, Barcelona, Bilbao, Zaragoza y sin duda Santiago de Compostela y La Coruña. Además, existen otras rutas internacionales que llegan a Vigo de paises como Portugal, Francia, Alemania y Holanda.
La estación de autobuses de Vigo se encuentra en Avenida de Madrid 57, justo al sureste de la colina de O Castro. Hay además líneas regulares para otros destinos de la provincia de Pontevedra que permiten entonces hacer excursiones de un día.
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En tren
Llegué en tren desde Santiago de Compostela bajando a la estación de Vigo Guixar, a solos unos minutos paseando del centro. El recorrido tardó alrededor de una hora y media, el precio es de 7,40€ por trayecto. Luego hay otra estación muy céntrica, Vigo Urzaiz, donde llegan los trenes Renfe alta velocidad AVE.
En avión
El aeropuerto de Vigo se encuentra a 9 kilómetros del centro ciudad y, además de los vuelos a Madrid operados por Air Europa e Iberia, los otros destinos conectados son:
- Bilbao (Air Nostrum)
- Barcelona (Vueling
y Ryanair)
- Dublín (Ryanair)
- Edimburgo (Ryanair)
- Milán Bérgamo y Bolonia (Ryanair)
- Lisboa (TAP Portugal)
La linea urbana L9A une el aeropuerto a Plaza Eugenio Fadrique del lunes al viernes y a García Barbón del sabado al domingo y los festivos. La tarifa es de 1,32€.
Dónde dormir en Vigo
En la ciudad la oferta hotelera es muy amplia y hay alojamientos – hoteles, pensiones, hostales, albergues, residencias y campings – adaptos a las exigencias de cada persona.
Por mi estancia en Vigo fue huésped del Hotel NH Collection, antes conocido como Palacio de Vigo, en Avenida García Barbón 17-19. La estructura se encuentra en un palacio muy elegante y cómodo porque está a 10 minutos paseando de la estación de Vigo Guixar mientras el casco antiguo está aun más cerca.
Sobre mi experiencia no hay mucho que decir, si no que fue simplemente genial. La marca NH Hotel es sinónimo de garantía, profesionalidad y máximo cuidado al cliente.
Mi habitación era una doble con baño privado y durante el check-in pedí que fuera con ventana hacia el interior para evitar el ruido de la calle. Me gustó el estilo de los muebles, simple pero con mucha atención a cada detalle. Los servicios incluyen comodidades como al aire acondicionado, artículos de baño, minibar, caja fuerta, tv con canales internacionales y WiFi gratuito (también lo hay en todos los ambientes del hotel).
Luego hay el desayuno, algo verdaderamente digno de mención. Eso porque encontré una amplia selección de productos dulces y salados, muchos de los cuales preparados la misma mañana, con incluidos también los típicos de la zona. Aparte de lo que ofrece el buffet, es posible pedir platos calientes.
El desayuno se sirve del lunes al viernes con horario 7-10:30, el sábado 8-11:30, el domingo y los festivos 8-12.
Turismo en Vigo: qué ver en un día
Llegué el domingo por la tarde pero llovía mucho y así solo dí un pequeño paseo cerca del hotel. Al revés, el lunes hubo un día soleado espectacular que me permitío disfrutar de los rincones de Vigo más bonitos a través de cuatros itinerarios temáticos: origen de la ciudad, casco histórico, época señorial, puerto y jardines.
Si buscad paseos guiados o excursiones de un día os recomiendo echar un vistazo a este artículo dedicado.
¿Listos por un paseo por la historia del Vigo? 😉
Monte de O Castro
O Castro es sin duda el lugar más emblemático en el corazón de Vigo porque aquí se instaló la primera población, probablemente celta. Entonces, este sitio nos enseña la origen de la ciudad gallega hasta la llegada de los Romanos, que modificaron las costumbres, construyeron salinas y villas de lujo con agua calientes y calefacción. También a ellos se debe el nombre Vigo, traducción del latino Vicus (aldea).
Antes de subir, os consejo parar al Yacimiento de O Castro, colocado en la ladera del monte. Gracias a las visitas guiadas – de martes a domingo, 10-14 y 16-18 – es posible descubrir el estilo de vida en Vigo entre los siglos III y I a.C. y ver la reconstrucción de tres edificios del antiguo poblado prehistórico.
Encima del monte se encuentra un parque rodeado por la única fortaleza que ha permanecido integra de las que formaron el sistema defensivo de la ciudad entre los siglos XVII y XIX. De hecho, a lo largo de la história, tras los romanos llegaron a Vigo varios pueblos y no siempre con buenas intenciones. Un ejemplo es la batalla naval de Rande en 1702, durante la Guerra de Sucesión Española: la flota angloholandesa ataca y destruye los galeones españoles que estaban llegando a Vigo desde las Américas cargando oro, plata, joyas etc. En el monte O Castro está colocado un monumento con las anclas que conmemora esta batalla.
Una vez llegado encima, alrededor de la muralla hay varias terrazas desde donde se puede disfrutar de vistas maravillosas de la ría di Vigo y su entorno hasta las islas Cíes.
Casco antiguo de Vigo
Bajando del monte hacia el mar se llega en Puerta del Sol, antigua puerta de la muralla y hoy punto de encuentro de las arterias principales de Vigo. Al centro destaca el monumento «El Sireno«, construido por Francisco Leiro, con la cara de la escultura que mira al mar.
Al otro lado de la calle hay Plaza de la Princesa, donde una vez alojaba el mercado del pescado, y pasando por debajo del arco se entra en Plaza de la Constitución.
Esta es la más grande del casco viejo y, además de los bares en los lados, destaca el edificio donde albergaba el Ayuntamiento mientras hoy se ha instalado la Casa Galega da Cultura, centro multidisciplinar basado en el estudio de la historia pasada y actual de Galicia.
Paseando por rúa dos Cesteiros, donde todavía se encuentran muchos productos característicos de la artesanía local como cestos y objetos de azabache y plata, se llega a la Plaza de Almeida. Aquí se puede mirar Casa Ceta, construida nel siglo XV y por eso la más antigua del centro histórico de Vigo: hoy es la sede del Instituto Camôes de la lengua portuguesa.
Mi itinerario acaba en la plaza dominada por la Concatedral, conocida también como La Colegiata, la iglesia más importante de Vigo. Construida en el 1811 (sobre otra anterior) según el estilo neoclásico, en su interior conserva la imagen del Cristo de la Victoria, obra relacionada a la victoria ante los franceses en 1809.
Muy cerca de la Iglesia está el Mercado de A Pedra, el lugar imprescindible para probar los productos típicos como las ostras o el pulpo.
Vigo señorial
Alrededor de la Puerta del Sol hay unas calles con palacios que bien representan el estilo arquitectónico emblemático del final del siglo XIX.
En esta zona he encontrado algunos de los rincones de Vigo que más me han gustado. Eso gracias a los edificios en piedra con fachadas decoradas en rúa Policarpo Sanz, rúa de García Barbón (donde estaba mi hotel) y rúa do Príncipe, una calle peatonal con tiendas, centro comercial y restaurantes que acaba justo delante del MARCO, el Museo de Arte Contemporáneo de Vigo.
Hoy, como en aquella época, los edificios son residencias así como sedes de empresas e instituciones.
Puerto de Vigo
Mi visita acaba en la zona marítima de Vigo, donde destacan edificios in piedras y jardines justo al lado del mar. Es el lugar adapto para dar un paseo en tranquilidad y luego comer en los bares y restaurantes que hay alrededor.
Cerca del Club Náutico está el muelle desde donde salen los barcos por las Islas Cíes, Cangas y Moaña. Hay varias compañías que efectuan salidas diarias, sobre todo en temporada alta (julio-agosto). Por aquí también se encuentra la oficina turística de Vigo.
En Avenida da Beiramar, al lado de los jardines de Elduayen, está colocado el monumento a Julio Verne.
Eso porque, conjuntamente al hecho histórico de la batalla de Rande, nació la leyenda por la cual el tesoro de los galeones españoles estarían todavía sumergidos en las aguas de la ría de Vigo. En este sentido, en «20.000 leguas de viaje submarino» el escritor francés menciona la bahía de Vigo durante la búsqueda del tesoro de parte del Capitán Nemo.
Cruzando la calle hacia el interior de la ciudad se llega al Parque de la Alameda, aun dicho Plaza de Compostela, un parque con fuente y símbolo de la expansión urbana de Vigo tras la demolición de las murallas al final del siglo XIX.
El puerto de Vigo es ideal para mirar el anochecer. Sin duda, mi consejo es dirigirse al centro comercial A Laxe y subir hasta la terraza panorámica.
No obstante hoy parezca ser abandonado, este mirador es simplemente perfecto porque ofrece una vista con encanto a 360° de todo el barrio y es posible mirar el sol bajar en el horizonte detrás de las islas Cíes…. un momento único e impresionante que ninguna palabra puede describir!
Gracias a estos itinerarios he podido visitar Vigo y ver la mayoría de sus sitios más importantes. Os recomiendo dedicar a la ciudad gallega por lo menos un día porque no es solo el puerto de salida por las islas atlánticas, también tiene un patrimonio histórico-arquitectónico que no hay que perder.
